Mi abuela paterna, Eugenia, (aunque todos la llamabamos “abue”), nació en Cuba, en La Habana. Hija de padres españoles que se conocieron y casaron allí, con 8 años vino a España. Esta conexión familiar con Cuba, es una de las razones que me habían llevado siempre a querer visitar la Isla.
Mi abuela, nunca jamás pudo volver a pisar tierra Cubana, pero recordaba con mucho cariño todo aquello, y especialmente guardaba muy buenos recuerdos del Malecón y de sus paseos por allí con su padre, mi bisabuelo.
Sin embargo a pesar de que una parte de mi necesitaba visitar Cuba, la tierra que acogió a mi abuela en su infancia, durante años me echó para atrás la imagen de turismo sexual que la acompañaba. Además quien me conoce sabe que actualmente no soy mucho de turismo de playa, me gusta mas visitar culturas, paises distintos, y eso que años atrás era casi pez. Pero lo cierto es que lo uno, unido a lo otro, me han llevado a retrasar este viaje hasta este verano.
Que equivocada estaba. No debeis tardar los que busqueis descubrir la magia de este pais, antes de que mas pronto que tarde, acabe siendo engullido por la globalizacion.
A pesar del sabor agridulce que me llevo, tengo que reconocer que viajar a Cuba es una experiencia única. Lamentablemente para los cubanos, en muchisimos aspectos, es retroceder en el tiempo a los años 50-60. Para nosotros los extranjeros, los turistas, sin embargo, es una experiencia que dificilmente puedes encontrar en otro pais. Las dos caras de una misma moneda.
Cuba es bella, es cierto, pero desgraciadamente tiene una belleza dificil de entender la mayor parte de las veces.
La Habana, fue nuestra primera parte del viaje, y la disfruté enormemente, sobre todo con mi cámara. Cada rincón que descubres tiene no una, sino millones de fotos, rostros, momentos, luces y colores distintos incluso en los mismos lugares. Tengo tantísimas fotos bonitas, que me ha resultado dificilisimo elegir. Así que me perdonaréis que esta publicación sea tan extensa.
Lo primero que te llama la atención al pisar suelo cubano, son los Almendrones, esos coches de los años 50, muy bien cuidados y renovados de cabo a rabo en sus entrañas, con motores y piezas de otros coches. Sin ellos parte de ese aire vintage y decadente se perdería.
En el centro de La habana, barrio “CENTRO HABANA” encuentras edificios imponentes, los más cuidados, que son pocos.
El principal es El Capitolio, rodeado de jardines y palmeras. Es una replica exacta del Capitolio estadounidense, aunque los cubanos dicen que tiene 1 metro mas de alto y de ancho, no iban a ser menos. Una parte de este edificio está destinada a visitas, pero otra, se destinará ya mismo a los trabajos y reuniones de la Asamblea.
A su lado el Teatro de Alicia Alonso, sede del Ballet Nacional de Cuba y que a principios del siglo pasado constituyó el edificio del antiguo centro Gallego, para mi gusto el edificio más imponente de La Habana. Cuando lo vi y me contaron que a principios del siglo XX había constituido la sede del Centro Gallego, no pude sino pensar en el poder que habían adquirido los gallegos emigrantes en aquellas tierras. Frente a él, el antiguo Centro Asturiano, también un edificio impresionante y hoy en día sede del Museo Nacional de Bellas Artes. Que sepáis que el Centro Vasco existe, en la zona de Miramar, si no tengo mal entendido, pero ni mucho menos alcanza la majestuosidad de estos edificios. Es muchísimo más humilde.
Casi todos los edificios cuidados, se encuentran en torno al Parque Central, junto a hoteles de siempre como El Hotel Inglaterra (el mas antiguo de La Habana) y el Hotel Telegrafo, y en torno a los cuales se aglutina la parada de Almendrones, los bici taxis, coco taxis y los coches de caballos, que te ofrecen la visita guiada por La Habana Vieja, que basicamente se encuentra peatonalizada.
Como os podeis imaginar los guías de los coches de caballos, son empleados del estado, sin embargo me sorprendió que muchos de los Almendrones eran ya alquilados y si entendí bien, incluso adquiridos al estado, con lo que te permitía negociar el precio.
Lo más desconcertante, y que más me llamó la atención, es que en esa misma calle con edificios imponentes, unos metros más abajo, en el conocido paseo Prado o Paseo José Martí, que te lleva hasta el famoso Malecón, y que separa La Habana Vieja de Centro Habana, encuentras edificios que se intuye han sido espectaculares, pero hoy en día están practicamente derruidos por dentro.
Aun mas llamativo que ese contraste de entorno en tan excasos metros, es que esos edificios en estado tan lamentable, se encuentran habitados. Y como la mayoría se trata de edificios que tiene alturas descomunales en cada planta, se aprovecha esa doble altura, para que en lugar de 1 vivienda por planta, existan dos.
De hecho, a la vuelta de la esquina del Teatro Alicia Alonso, y al lado de la fábrica de habanos Partagás, hay un edificio tan afectado, que incluso en la fachada creen árboles, como podeis ver en la imagen.
La Habana, cuenta con más de 2 millones de habitantes y geográficamente es grandísima, más de 720km2. Se divide en distintos distritos, los principales son, Habana Vieja, Centro Habana (!ª expansion 2ª mitad del siglo XIX), Vedado (2ª expansión primeros años siglo XX), Nuevo Vedado y Miramar que es la zona residencial y de las embajadas.
El distrito más interesante y más antiguo (siglos XVI y XVII) por su pasado colonial, y porque está considerado Patrimonio Cultural de la Humanidad por la Unesco es “HABANA VIEJA”. Gracias a la calificacion de Patrimonio Cultural de la Humanidad, una parte importante de los edificios de La Habana Vieja se encuentran en bastante buen estado.
Otros sencillamente se encuentran en un estado que deja mucho que desear. Aunque hay que reconocer que la mayor parte tienen su encanto. Porque se trata de edificios de porte colonial, con soportales y portales altos y fachadas que en su día fueron realmente hermosas.
No resulta dificil encontrar en sus calles rostros de mirada perdida, de piel morena, que rezuman historias de lucha diaria, como éste de Lola, que vendía flores sentada en un banquito a la puerta de su casa.
Rostros cargados de duras historias, que te desarman con solo mirarlos.
Pero Cuba también es fiesta, música y baile, así que muchos Cubanos en su lucha diaria por sobrevivir en una Cuba tan dificil, se ponen desde la mañana el traje de sonrisa y color, y gracias a esa música y baile que corre por sus venas, los encuentras al doblar cada esquina, en espectaculos callejeros o en las puertas o interiores de los locales.
En la Habana Vieja, te recomiendo callejear, sólo así vivirás la ciudad.
La calle Obispo, es quizás su arteria principal y una de las calles mas conocidas. Comienza en el Parque Central, junto a la Floridita, el local donde Ernest Hemingway tomaba sus famosos Daiquiris (visita obligada) y llega hasta la Plaza de Armas.
A lo largo de esta calle, y hasta desembocar en la Plaza de Armas, podeis encontrar distintos locales. Desde una antigua droguería-farmacia que se conserva con su estilo colonial, hasta la casa más antigua de La Habana, toda de madera y el Hotel Ambos Mundos, donde el amigo Hemingway tuvo reservada una habitacion durante años.
Eso si, no hay supermercados como tales, no los busques. A lo sumo tiendas pequeñas con pocas cosas. El wifi existe, de hecho la mayoría de cubanos disponen de su celular, pero el wifi solo funciona para los turistas mediante la compra de tarjetas tipo rasca, que por un precio de 1 € la hora te permiten disponer del servicio. En cuanto al cambio de moneda hazlo siempre en el hotel o en las casas de cambio oficiales (Cadecas). Y si quieres comprar puros, no compres los que te ofrecen por la calle casi siempre mas baratos, pero con unas condiciones de conservación muy deficitarias, que les hacen perder todo el valor. Eso si, los habanos buenos baratos no son. Para que te hagas una idea, practicamente nada en Cuba es barato para los turistas y para el resto de su poblacion, la mayor parte de las cosas resultan absolutamente inalcanzables.
Por otra parte, en cuanto a seguridad en la calle, ningún problema.
En cuestiones gastronómicas, no olvides disfrutar los extraordinarios cocos, mangos y aguacates de la Isla, si coincides con la época, son deliciosos y gigantescos comparados con los que encontramos aquí. En Agosto era época de Mangos y Aguacates, y puedo decir que practicamente no probé postre alguno, pero eso si, me atiborre de mangos. Tampoco dejes de probar los chips de plátano verde, que son como patatas fritas, totalmente adictivos, y su puré, delicioso.
Si lo que buscas es comer en la calle, acude a los “Paladares”, casas de comidas de los cubanos, donde puedes comer desde su tradicional comida criolla (arroz con frijoles, enchiladas, tamales, masa de cerdo al carbón…), bastante bien de precio, hasta otros platos más elaborados, y más caros, en locales con decoración bastante cuidada. Como os decía, no os llevéis a engaño, Cuba, para el turista, no es barata por lo general. Haceros a la idea de que una botella de agua pequeña, son 3 pesos convertibles (cuc), unos 3 euros al cambio y la de litro y medio 6 pesos convertibles (cuc), unos 6 euros. Una verdadera salvajada, teniendo en cuenta el calor y la humedad que reina, y que no puedes tirar de agua del grifo por cuestiones higiénicas.
Si queréis comer rico, en esta calle nosotros encontramos el Paladar Mercaderes, un local con decoración decadente pero de cocina muy potable, con un servicio muy atento, donde disfruté de un ceviche de corvina sensacional y muy refrescante.
En la misma calle Mercaderes, justo enfrente del anterior, La Imprenta, donde en los locales de una vieja imprenta semiderruida, decorados con gusto, imaginacion y mucha vegetación, nos sirvieron una tabla de mariscos y pescados asados al carbón deliciosa.
Ya véis que en cuestiónd e restauración y turismo, Cuba evoluciona a su ritmo, pero en la misma linea que en Europa.
En la Habana Vieja, no dejéis de visitar, alguna de sus 3 FORTALEZAS junto al faro, que son Castillo de la Real Fuerza (1558) en la plaza de Armas, y al otro lado de la bahia, Castillo del Morro (siglos XVI-XVII) y Fortaleza San Carlos de la Cabaña (siglo XVIII).
Y las 4 PLAZAS:
Plaza de Armás, la mas antigua, desde donde se ve “la Giraldilla” en lo alto del Castillo de la Real Fuerza (abajo). Se trata de una imagen que no es sino una veleta de hierro, y que representa a Doña Isabel de Bobadilla, esposa de Hernando Soto, Capitan General de la Ciudad nombrado por el Rey de España, Carlos I y que en ausencia de su esposo, que fue a explorar los actuales Estados Unidos, fue la única mujer que rigió la Ciudad. Su esposo nunca regresó, murió en dicha gesta y la imagen la representa en lo alto, en señal de espera. La Giraldilla es uno de los emblemas de la ciudad, que aparece en vitolas de puros, etiquetas de Ron…
Plaza de San Fco de Asís, segunda en antiguedad, situada mirando al puerto, y donde en el siglo XVI atracaban los galeones españoles en su paso a las Indias. Le da nombre la iglesia y Convento de San Fco de Asís, que se encuentra junto a la fuente de Los leones. En dicha plaza se encontraba el mayor mercado de esclavos de toda America, ya que se llevaba a cabo la venta de esclavos traidos de África, que iban a parar tanto a America del Norte, como a America del Sur.
Me da escalofríos sólo imaginarme en la plaza que veis bajo estas lineas, ese mercadeo humano.
Plaza Vieja, que es la Plaza que antiguamente constituia la Plaza del Mercado, con una fuente en el centro, que se encuentra enrejada, al parecer para que en su época los mercaderes no se deshiciesen de la mercancía que no vendían en la fuente. Los calores ya se saben, hacen estragos y más en aquella época que no tenían frigoríficos. Total que para evitar la guarrada, enrejaron la fuente. Para mi es la plaza más bonita, o quizás al menos la más cuidada, porque está rodeada de soportales y casas solariegas de la antigua burguesía criolla, que hoy albergan la avanzadilla de los principales establecimientos occidentales, como Benetton.
En la plaza Vieja, encontraréis entre otras, la casa del Café y la Casa de la Cerveza, aunque solo tienen dos cervezas en la Isla, “Cristal” (la más suave) y “Bucanero” (la fuerte). Disfrutad de sus vistas, de su música y de su ambiente, tomando una cerveza. No sabeis como refresca, una cervecita, con ese calor húmedo que no te abandona en toda la visita, sobre todo en pleno Agosto.
Plaza de La Catedral, donde se encuentra La Catedral de San Cristobal de La Habana, con un aire que se asemeja un tanto a la Catedral de Cádiz, de estilo barroco y rodeada también de los palacetes o mansiones de la nobleza habanera colonial.
Y por supuesto al atardecer, no dejéis de daros una vuelta por su tan conocido Malecón, siempre repleto de cubanos con su música, pescadores y unas vistas de la bahia de La habana espectaculares.
Fuera de Habana Vieja, ya en el barrio de EL VEDADO, debeis visitar la Plaza de la Revolución, el lugar donde Fidel daba sus interminables discursos bajo un sol de Justicia. Arquitectura muy años 70 y similar a la de los Paises del Este, aunque dicha plaza fue construida en tiempos de Batista y entonces se llamó la Plaza Civica. La verdad no tiene mucho que ver, salvo el interés histórico y los dos relieves escultoricos del Ché en el edificio del Ministerio de Interior, con la frase “Hasta la victoria siempre” y de Camilo Cienfuegos en el Ministerio de Comunicacioines “Vas bien Fidel”
En el barrio de Centro Habana, y al hilo de este relato histórico también encontraréis el “Museo de la Revolución”, ubicado en el antiguo palacio presidencial, de donde huyó Batista ante la llegada de la Revolución a La Habana. Todo el edificio y sus exposiciones son una Oda a la revolución, al Ché, a Camilo Cienfuegos y por supuesto a Fidel y Raúl Castro. Interesante visitar para conocer la historia de los últimos 100 años de Cuba, contada por los revolucionarios y luego salir a la calle y preguntarte… ¿Y esto, cómo es posible?
Otro edificio que no debéis dejar de visitar por su encanto, es el Hotel Nacional. Se encuentra en el barrio “El Vedado”, frente al Malecón, pero vale la pena desplazarse hasta allí. Es un edificio declarado Patrimonio de la Humanidad, con una arquitectura colonial cargada de encanto, perfectamente conservado y con una historia amplia, no solo de visitantes ilustres, como Winston Churchill y Frank Sinatra entre otros, sino muy ligado tambien a la propia revolucion.
Os recomendarán “La bodeguita del medio” “Habana Vieja”. Para mi una tasca para turistas, muy visitada por famosos, y llena de sus fotos y firmas por todas las paredes, donde dicen que se inventó el mojito, pero para mi gusto absolutamente prescindible, tanto la visita como el mojito.
Sin embargo si teneis tiempo, acudid a la ceremonia del cañonazo. Se realiza todos los días a las 9 de la noche en una de las fortalezas que aun conserva La Habana, en concreto desde la Fortaleza de San Carlos de la Cabaña, y rememora con los soldados vestidos con uniformes de época (hoy muchachos cubanos de no mas de 18 años haciendo el servicio militar) como cada día para evitar que La Habana fuera atacada por piratas, corsarios o tropas extranjeras, se cerraban las puertas de la ciudad. Para avisar a sus habitantes, como no había otro medio, se lanzaba un cañonzo. Las vistas al anochecer de La Habana desde la Fortaleza son espectaculares. Eso si ir provistos de algún spray antimosquitos.
En el barrio de “El Vedado”, yo visité también La Universidad de La Habana y el Cementerio de Colón, una curiosidad, pero con unos panteones impresionantes, muchos de ellos con apellidos vascos. No hay que olvidar que La Habana, al menos hasta los años 50, fue una ciudad tan importante y rica como puediera ser cualquiera de las americanas o europeas.
Desde La Habana, hicimos excursión a VIÑALES, un valle espectacular,
y la zona donde se encuentran los secaderos de tabaco.
De allí marchamos a VARADERO a descansar en la playa. Arena blanca, aguas turquesas de las que no quieres salir, con cielos espectaculares, con unos sunsets divinos.
Disfrutamos de paseos interminables a la orilla del mar, lectura, sesiones de running y mucho relax, y por qué no decirlo de algún que otro mojito, daiquiri y piña colada.
Había que descansar y recargar pilar para afrontar el año con ilusión y energía.
Al final me quedé sin visitar Trinidad y Cienfuegos, pero Cuba es una isla bien grande, donde las distancias son aun mas grandes debido a los vehiculos y controles policiales que pueden pararte en cualquier momento. Así que con un viaje de 9 horas a la vuelta de la esquina, resultaba muy cansado.
Otra vez será.
Espero que este pequeño resumen del viaje os sirva de ayuda si os animáis a visitar Cuba, y sino, espero que sencillamente hayáis disfrutado con sus imagenes y contenido.
A seguir disfrutando.
Virginia
Amílcar Forno
Virginia viajaré en unos 3 meses más a Cuba…me encantaría solo si te parece..mantener contacto contigo tengo muchas dudas y sería genial si pudiera despejarlas y compartirlas contigo…mi correo electrónico… perfumeorganico@gmail.com.
De antemano muchas gracias
Amílcar Forno
Virginia
Buenos días. Encantada de resolver tus dudas en la medida que pueda.
Mandame un mail a mi correo vir.martin7@gmail.com y a ver que podemos hacer. Un besazo y feliz año
Silvia Martín Sánchez
Preciosa entrada y preciosas fotos. Nunca me he planteado ir pero este año conocí una señora cubana que vive en La Habana y entre eso y tus fotos me están entrando unas ganas locas.
mon
Tenía que tener un momento largo para disfrutar este reportaje. Ha sido ahora. Ha sido genial. Las fotos, Virginia, como no, son maravillosas, especialmente los retratos… ahí te has lucido..esa vendedora de flores, esa mujer con el pañuelo americano en la cabeza, la que fuma sentada… son todos geniales (pedías permiso o se dejaban fotografiar?). La abuela es espectacular, ese rostro cuánto cuenta y encima sonríe. Una foto de Nathional Geografic sin duda alguna.
Cuba, hermosa, no podía ser de otro modo. Me gusta que has drrumbado el mito de que todo es barato ahí.. eso es lo qeu siempre he oído. Hay que ir preparado a los sitios y saber.
Yo solía comer con Regino, en casa de una tía todas las semanas. Le echamos mucho de menos. Era un hombre tan cubano… había tenido una hacienda, su familia vaya, con servicio y todo, y cuando llegó Fidel se lo expropiaron todo. De todos modos, pudieron salvar mucho y el vivió muchos años en Nueva York y por Europa de sus réditos. Aunque al final recaló en Barcelona, y trabajó por primera vez en su vida, hasta su jubiliación. Regino era maravilloso, con esa socarronería y con esa melancolía que acompaña a todo cubano exiliado. No quería volver hasta que no muriera Fidel. Se fué él antes. Gracias también por traerme su mundo, del que tantas veces nos hablaba.
Precioso Virgi.
La Cuina Violeta
Vaya, vaya. Qué fotos! Impresionantes. Me has hecho coger ganes de desenterrar las mias, són analógicas, de hace 25 años. Me parece que las voy a digitalizar pronto.
Un abrazo y un beso para el guapo que te acompañó!
Nani
luisa
Guauuu me encanta y lo tenía en mi lista, pero ahora es prioridad con estas fotazas. Besos.
Patry de Sabores y Momentos
Ohhhh has conseguido emocionarme con este maravilloso reportaje Vir!!! Se me han agolpado todos los recuerdos de mis varias visitas a la isla hace la friolera de 20 años ya!!! Tengo que volver!!! Gracias cielo!!😊
ridente
Estupendo post Virginia; ¡qué suerte poder viajar!. Las fotografías son preciosas.
Gracias por compartir vuestra experiencia 🙏🍷👏👏👏👏👏.
Rosa
Precioso reportaje Virginia, visite Cuba en mi viaje de novios e hice un tour por la isla. Ya veo que continúa exactamente igual, como si se hubiese pagado el tiempo.
Bss
La Cocina de Las Casinas
QUé reportaje tan espectacular, muy mejorada La Habana desde que estuve en 2000, aunque te parezca mentira el término “mejoría”. Santa Clara también merece la pena visitarla, ciudad hermanada con Oviedo y los Cayos, menos turisticos que Varadero, me muero por un mojito en el Hotel Inglaterra, jaja, me has creado la necesidad de volver querida Virginia, fotazas, bsss Marga, tengo en pendientes mi viaje a Cartagena de Indias de mayo, ufffffff no doy pa tooooo
manu
Fantastico reportaje. Me hs encantado. Tengo un amigo que tiene casa allí y siempre me dice que vaya, wue me gustará. Me has acabado de convencer….
besos
Por cierto, las fotos preciosas y con ese aire retro que le has dado…..😉
Tengo una receta que el me dió, siempre me pasa recetas, que creo que es un bocadillo tipico del Floridita….😂