Y como no hay salado sin dulce, terminamos ya esta semana dedicada a la cereza, con la receta dulce.
Un refrescante Tiramisú de cerezas, en el que sustituimos el café y el licor marsala que moja los bizcochos, por un sirope de cerezas y naranja, coronado con una compota de cerezas y recubierto con la tradicional crema de marscapone y la lluvia de chocolate. Un postre de 10 para esta temporada, que os animo a probar.
Si os gusta el tiramisú y os gustan las cerezas, esa preparación os encantará, pero si sois de los que consideráis que el tiramisú es en ocasiones sosote, olvidaros de esta palabra cuando os refiráis a esta versión. La compota de cerezas con su jugo reducido, junto con el cacao que cubre la crema de mascarpone es una combinación deliciosa en sabor, que junto con la crema y la textura crujiente de las cerezas en compota, harán que no podáis dejar de bucear con vuestra cucharilla en esa copa. Irresistible.
Y es que la temporada de cerezas da para mucho, si señor.
Los bizcochos de la base, podéis usar los adquiridos en el super o preparar vosotros mismos vuestras soletillas caseras. Para mi gusto están mas ricas estas, pero me sobraban unos bizcochos de otra preparación anterior y no quise tener que tirarlos.
Es además un postre que de esos que podeis tener preparado con cierta antelación en el frigo, y solo pendiente de espolvorear el cacao antes de servirlo, así que os ahorrará muchos quebraderos de cabeza. Pero ojo, digo cierta antelación, de la mañana a la tarde… no mas, porque de lo contrario los bizcochos se aguarán en exceso.
Vamos con la receta que es sencilla:
INGREDIENTES: (Para 3-4 copas de tiramisú)
- 9-12 bizcochos de soletilla
- 3 huevos
- 250 gr. de queso mascarpone de calidad
- 2 cucharadas de azúcar colmadas
- 1 pizca de sal
- cacao en polvo
- compota de cerezas
Para la compota de cerezas:
- 400 gr de cerezas
- 25 gr. de azúcar glass
- 250 ml. de zumo de naranja (el zumo de 2 naranjas)
- El zumo de 1/2 limón
- 100 ml de licor de cerezas
PREPARACIÓN:
Si nos decidimos por preparar los bizcochos caseros, el día anterior preparamos nuestras soletillas.
Preparamos la compota de cerezas:
Para ello limpiamos y deshuesamos las cerezas. Para este fin nada mejor que el utensillo que veis en las imágenes, que me traje ya hará unos cuantos años de un viaje a California, cuando aquí, aun no se podía encontrar casi nada. Deshuesas las cerezas en un abrir y cerrar de ojos, y lo mejor, sin mancharte prácticamente las manos. Pocos de los nuevos artilugios cocineriles me ha resultado tan prácticos…
Una vez deshuesadas nuestras cerezas, reservamos en un bol para recoger sus liquidos.
En un cazo mediano ponemos el zumo de naranja, el zumo de limón, el azúcar glass y el aguardiente de cerezas. Ponemos a fuego medio. Cuando comience el hervor añadimos las cerezas que teníamos reservadas. Dejamos cocinar a fuego medio durante unos 15-20 minutos, no mas. Al menos para mi gusto. Me gusta que queden con cierta textura y con color. Cuanto mas tiempo mantengamos al fuego, nos quedarán mas blandas y sobre todo mas blanquecinas.
Pasado este tiempo sacamos las cerezas y reservamos. Para ese momento el jugo ya se habrá teñido de un bonito color rojo. Lo dejamos a fuego medio-bajo, durante otros 15-20 minutos. Reservamos.
Vamos con la crema de mascarpone:
Separamos las yemas de las claras, montamos las yemas con una cucharada de azúcar, hasta obtener una crema blanquecina que haya duplicado o casi triplicado su volumen. Yo lo hago con el accesorio de globo de mi Kitchen Aid, pero lo podéis hacer con la batidora de mano provista de las varillas.
Añadimos a continuación el queso mascarpone y batimos bien hasta integrarlo. Reservamos.
En un bol bien limpio, montamos las claras de huevo con una pizca de sal, hasta que al voltear el bol, las claras no se muevan. A mitad del montaje incorporamos la cucharada de azúcar restante, en forma de lluvia y con la batidora en marcha.
Incorporamos las claras montadas a punto de nieve a la preparación de queso, en dos o tres veces y con movimientos envolventes y ayudadados de una espátula.
Vamos ahora con el montaje del tiramisú.
Elegimos el recipiente donde vayamos a servirlo. En este caso he optado por versión individual, me parece mas practico, ya que te evita el tener que andar cortando y desde luego resulta mas vistoso a la hora de presentar.
Empapamos los bizcochitos por una de sus caras, en el sirope resultante de la compota. Ojo, no queremos que se queden blandos, solo bien humedecidos. En este caso, además la compota que colocaremos sobre ellos hará el resto.
Si queréis que os quede perfecto, os recomiendo cortar los bizcochitos del tamaño de la base del recipiente donde lo vayamos a presentar con ayuda de un aro.
Cubrimos con ellos la base de la copa. A continuación añadimos una capa generosa de compota de cerezas y cubrimos con la crema de mascarpone.
Si no vamos a disfrutarlo en el momento, cubrimos las copas y llevamos al frigo hasta el momento de servir. A mi incluso me gusta darle un punto de congelador durante unos 5-10 minutos antes de servir, para que quede mas firme.
En el momento de servir, espolvoreamos una generosa capa de cacao en polvo.
Repartir cucharillas y listos para bucear en el interior de este delicioso postre.
A disfrutar.
Virginia
Encantada me has dejado y eso que debo confesar que siempre que leo tiramisú de algo que no sea tiramisú me echa para atrás, pero ha sido ver las fotos y leer la preparación y necesitar urgentemente probarlo, qué delicia!!!
Besos. Paula
Un postre de lujo! Menuda combinación de sabores y colores más llamativa. Tiene que estar buenísimo!!
Las fotos espectaculares, como siempre.
Besos
Pues creo que esta versión incluso me gustaría mucho más que la clásica… El color del sirope, la compota con la cremosidad del mascarpone, además de entrar por la vista ha de ser pecado de pura gula!
Qué bien estás aprovechando la temporada de cerezas :o)
Besos,
Palmira
Estupenda la receta y fantásticas las fotografías, Virginia.
Tiene que estar riquísimo Vir! Me aprece una idea super original y desde luego las fotografías invitan a ponerse a bucear en cada una de las copas. Una luz y unas composiciones preciosísimas, enhorabuena!!
Beso grande!