Yotam Ottolenghi es uno de mis chefs fetiche, no solo porque me acerca a la cocina de Oriente Próximo, sino porque con su recetas vegetarinas no notas en absoluto la falta de carne o pescado. Cada vez que paro en Londres, no dejo de acudir a alguno de su restaurantes.
Tengo 4 de sus libros, tres en ingles y este último en castellano, “The cookbook”, “Plenty” y “Jerusalem“, en ingles, y el último “Exhuberancia“ en castellano, que salió en Noviembre de 2016, pero en inglés en 2014 (“Plenty more”). Cada nuevo libro me sorprende, como usa las veggies, como las combina. Y bueno no me olvido de los dulces. Los dulces de Oriente Próximo me vuelven loca, así que no sabéis lo que disfruto.
Hoy os traigo una receta de su libro “Jerusalem”, muy sencilla y rapidita, que sin embargo está absolutamente deliciosa, adictiva total, aviso a navegantes. Es tan sencillo que incluso lo podéis tener preparado en la nevera, solo pendiente de hornear y bañar con el almibar. Así que se convierte en un postre ideal para recibir invitados. También resulta una receta fantásitca para preparar con los peques, porque se divertirán un montón, pintando con mantequilla las hojas de pasta filo y mezclando con un tenedor el queso. Vamos que ayuda a hacer familia y cocina ;).
Se trata de un pastel de queso dulce típico de Palestina. Se conoce como FATEERA o KELLAJ en Palestina y MUTABBAQ en Israel. Se prepara al estilo de los dulces árabes, con pasta filo y se rellena de queso fresco, (ricota y queso fresco de cabra que le da el punto más sabroso). Se baña con un almíbar, en mi caso aromatizado con agua de rosas, pero que podéis aromatizar con ron, agua de azahar o lo que más os guste. Se terminar espolvoreando pistachos picados.
Ottolenghi, nos dice que también se suele presentar con un relleno a base nueces, canela, azúcar u mantequilla.
Vamos con la receta:
Dificultad: fácil
Tiempo: 15 minutos +25 de horneado
INGREDIENTES: (Para una bandeja de 25 x 20 aprox)- 12 porciones de 5 x 5 cm
- 14 hojas de pasta filo
- 65 gr. de mantequilla derretida
- 250 gr. de ricotta
- 125 gr. de queso de cabra fresco
- Pistachos triturado
- 45 ml de agua
- 140 gr. de azúcar
- 2 cucharadas de zumo de limón
- 1 cucharada de Agua de Rosas (Agua de Azahar, ron o lo que os guste)
PREPARACIÓN:
Precalentar el horno a 230ºC calor arriba y abajo.
Mezclar los dos quesos con un tenedor y reservar.
Barnizar con la mantequilla derretida la bandeja de hornear que vayáis a utilizar.
Colocar 1 hoja de pasta filo de forma que quede bien ajustada a la bandeja, pero cuelgue ligeramente por el exterior y barnizarla con mantequilla. Colocar otra hoja y barnizar, así hasta completar 7 hojas de pasta filo.
Repartir el relleno de queso por la superficie de la última hoja de pasta, barnizar con mantequilla y cubrir con las otras 7 hojas de pasta filo barnizadas con mantequilla.
Recortar el sobrante de hojas de pasta filo casi hasta alcanzar el relleno de queso, pero sin tocarlo. Arremeter la pasta por los laterales del pastel.
Cortar el pastel en cuadraditos de mismo tamaño, sin llegar a alcanzar la última hoja.
Hornear a media altura durante unos 20-25 minutos, o hasta que el pastel adquiera un bonito color dorado.
Mientras el pastel se hornea preparamos el almíbar de agua de rosas.
Ponemos en un cazo el azúcar con el agua a fuego medio y mezclamos hasta que todo esté disuelto. Dejamos que hierva durante 3 minutos. Retiramos del fuego y añadimos el zumo de limón y el agua de rosas.
En el momento de sacar el pastel, en caliente, vertemos el almíbar por toda la superficie, repartiéndolo uniformente.
Dejamos entibiar y servimos templado.
Pura delicia, para acompañar un café de puchero.
Consejos:
– No dejéis las hojas de pasta filo al aire, mientras montamos el pastel, son muy finas y tienden a secarse y quebrarse. Os aconsejo cubrirlas con un paño limpio húmedo.
- 14 hojas de pasta filo
- 65 gr. de mantequilla derretida
- 250 gr. de ricotta
- 125 gr. de queso de cabra fresco
- Pistachos triturado
- 45 ml de agua
- 140 gr. de azúcar
- 2 cucharadas de zumo de limón
- 1 cucharada de Agua de Rosas (Agua de Azahar, ron o lo que os guste)
- Precalentar el horno a 230ºC calor arriba y abajo.
- Mezclar los dos quesos con un tenedor y reservar.
- Barnizar con la mantequilla derretida la bandeja de hornear.
- Colocar 1 hoja de pasta filo de forma que quede bien ajustada a la bandeja, pero cuelgue ligeramente por el exterior y barnizarla con mantequilla. Colocar otra hoja y barnizar, así hasta completar 7 hojas de pasta filo.
- Repartir el relleno de queso por la superficie de la última hoja de pasta, barnizar con mantequilla y cubrir con las otras 7 hojas de pasta filo barnizadas con mantequilla.
- Recortar el sobrante de hojas de pasta filo casi hasta alcanzar el relleno, pero sin tocarlo. Arremeter la pasta por los laterales del pastel.
- Cortar el pastel en cuadraditos de mismo tamaño, sin llegar a alcanzar la última hoja.
- Hornear a media altura durante unos 20-25 minutos, o hasta que el pastel adquiera un bonito color dorado.
- Mientras el pastel se hornea preparamos el almíbar de agua de rosas.
- Ponemos en un cazo el azúcar con el agua a fuego medio y mezclamos hasta que todo esté disuelto. Dejamos que hierva durante 3 minutos. Retiramos del fuego y añadimos el zumo de limón y el agua de rosas.
- En el momento de sacar el pastel, en caliente, vertemos el almíbar por toda la superficie, repartiéndolo uniformente.
- Dejamos entibiar y servimos templado.
A disfrutar.
VIRGINIA
Mari Trini
Sublime pastel.
Fantastico descubrimiento !!!, ahora tus recetas vienen preparadas para imprimir. Mil gracias.
Saludos.