HOTEL LA PLETA EN BAQUEIRA

Fin de semana romático en el Hotel La Pleta en Baqueria, para celebrar nuestro San Valentín particular bajo la nieve.

Con mucha nieve y frío, pero en un hotel de lujo a pie de pista, para disfrutar este fin de semana, en el que no ha faltado ni el esquí, ni su momento spa, ni gastronomía con estrella Michelín a cargo del Chef Quim Casellas.

Para que os hagáis una idea, estas son algunas de las vistas que disfrutamos desde una de las ventanas de la suite en la que nos alojamos. De cuento invernal.

 FIN DE SEMANA EN LA NIEVE

Llegamos nevando y nos fuimos con una jornada de sol espectacular.

La habitación que nos recibió, sencillamente despampante para un fin de semana romántico.

Sesenta metros cuadrados de suite abuhardillada cubierta de madera y con un jacuzzi para relajarte tras la jornada de esquí. Decoración de montaña, con toques étnicos, que le dan una especial calidez. Os he de confesar que esta decoración especial me hizo recordar la historia del libro “Palmeras en la nieve”, que desgraciadamente se ha hecho más famoso por la versión en el cine, que queda muy lejos de la versión literaria.

Las dos jornadas que pasamos, las alternamos entre las magnificas pistas de esquí de Baqueria, con guía incluido ofrecido por el hotel, y la zona de spa y piscina con la que cuenta este establecimiento.

Por desgracia no pudimos disfrutar de unas jornadas de aventura en moto de nieve, que también ofrece el hotel, ya que el sábado fue un día de niebla precioso, pero dificil para este tipo de actividades

Eso si, la niebla nos permitió disfrutar de las instalaciones del hotel.

El baño en la piscina climatizada, resultó ideal después de la jornada de esquí, y antes del circuito de aguas del Spa Occitania y del masaje relajante, que nos dejó como nuevos; listos para disfrutar de  otra jornada de esquí y eso si, de una cena espectacular de Estrella Michelín.

Como os digo, en este fin de semana romántico no dejamos de lado la gastronomía, No hay viaje en el que no nos guste compaginar deporte, fotografía y gastronomía y este no iba a ser una excepción.

Gracias a los cuatro espacios de restauración con que cuenta el hotel La Pleta; “La racletterie”, “La pleta Sushi”, “Petita Borda” y “Del Gel al Foc” no hubo tiempo de echar de menos la buena mesa.

Tres restaurantes con una cocina cuidada, Me encantó la burrata ahumada con tartar de tomate y albahaca, y el arpaccio de jabalí, y por supuesto un yogurt denso artesano que preparan con leche de las vacas de la zona.

Me rechifló disfrutar después de una de las jornadas de esquí, de la típica raclette, envuelta en sillones corridos cubiertos de mantas de piel y con vistas a la montaña blanca de nieve.

Y como os digo, no nos olvidamos de las Jornadas Estrella Michelín by la Pleta, que organiza el Hotel a lo largo del año.

En esta ocasión tocó el turno al equipo de Quim Casellas, del restaurante Casamar de Llafranc en Girona, al que no dudaríais, convencí para posar de esta forma en la cocina, al final del servicio. Una cena espectacular que terminó con un postre no menos espectacular.

Entre los platos ofrecidos:

• Laminado de Ceps con tartar de cigalas y aceite de piñones,
• Setas de temporada con yema de huevo y consomé de Trompeta de la muerte,
• Pichón de Bresse con boniato y salsa Perigourdini,
• Escudella i carn d’olla,
• Rodaballo salvaje con crema de calabaza
• Cochinillo a la Papillotte con parmentier trufado y salsa de pimienta
• Xo-co-la-te en diferentes texturas

A la salida el domingo, un café calentito para disfrutar de las últimas vistas de nieve el sol que timidamente se anunciaba tras la ventana.

El retorno a casa, con paisajes de nieve en el pirineo, tan espectaculares como estos que aquí os dejo y que espero que disfrutéis tanto como hice yo durante el trayecto.

No me digais que esta ola polar que tenemos encima este año, no nos está haciendo disfrutar además de pasar frío.

A disfrutar.

Virginia