Un pan rápido, integral y semidulce, porque aunque lleve una cierta cantidad de azúcar no te da en absoluta la sensación de estar comiendo un bizcocho, sino más bien eso, un pan semidulce, debido quizás al uso de harina integral. A pesar de ser integral y de lo que pudiera parecer a primera vista, no resulta seco, sino con una humedad que le permite pasar los días sin resentirse demasiado. Lo mismo lo puedes comer tal cual, que tostarlo ligeramente y untar una buena mantequilla. Una delicia con aroma alimonado y la agradable sensación al morder de las semillas de amapola.
Si además os cuento que la receta la encontré en el libro “Pan de Limón y Semillas de Amapola”, de Cristina Campos, una novela fresca, que trata temas actuales de forma dinámica, con un hilo conductor situado en Mallorca y entorno a una panadería de un pequeño pueblo, entenderéis que finalizado el libro, no pude sino que correr a la cocina, comprobar que tenía todos los ingredientes, incluso los limones recién cogidos de mi limonero en el jardín, y ponerme manos a la obra, a las 8 de la tarde.
Prepararlo y luego disfrutarlo tranquilamente al día siguiente, a la semisombra de mi limonero, en estos días luminosos que nos ha regalado Febrero, me hizo rememorar la historia, pensar en lo rápido que pasa la vida, y desear aun si cabe con más ganas la llegada de la primavera y esos días largos.
Y es que siendo como soy una voraz lectora, os tengo que confesar que no solo los libros de gastronomía me inspiran, cada vez consumo menos de este tipo, y soy más selectiva con su compra. Tambíen la narrativa, que en los últimos tiempos viene aderezada de historias en torno a la cocina, me inspira. De hecho ya os traje en su día el coulant de “La sonrisa de las mujeres” de Nicolás Barreau, y tengo pendiente traeros alguna que otra receta de otro par de libros.
La receta sencilla, pero os animo a probarla, al igual que a leer esta agradable novela de básicamente historias reales de amistad, relaciones familiares y el tiempo pasado que no se recupera. Eso si, si podéis, elegid limones ecológicos y a ser posible cultivados con mucho cariño. Un ingrediente fundamental para esta receta.
Vamos con ella, fácil y especialmente adictiva, por lo aromático del aceite de los limones, la textura húmeda que le da la mantequilla, el azúcar moreno y la leche, y densa y crujiente que le da la harina integral y las semillas de amapola:
PAN DE LIMÓN CON SEMILLAS DE AMAPOLA
Dificultad: Fácil
Tiempo: 1 hora y 15 minutos aprox
INGREDIENTES: (Para un molde de 25 x 12 cm aprox 900 gr)
- Ralladura de 2 limones ecológicos bien limpios (solo la parte amarilla)
- 30 gr. de semillas de amapola
- 350 gr. de harina integral (puede ser de espelta)
- 200 gr. de azúcar moreno
- 250 ml de leche a temperatura ambiente
- 200 gr. de mantequilla
- 3 huevos “L” a temperatura ambiente
- 1 sobre de gasificante de respostería 16 gr. aprox. (tipo Royal)
- 1 cucharadita de sal
PREPARACIÓN:
1.- Precalentamos el horno 180ºC calor arriba y abajo. Encamisamos un molde de cake de unos 25 x 12 cm, forrandolo con papel de horno.
2.- Derretimos a fuego lento la mantequilla y reservamos fuera del fuego para que se entibie
3.- Mezclamos la harina, el gasificante y la sal. Reservamos
4.- Batimos bien los huevos con el azúcar y la ralladura de limón, hasta que que hayan casi doblado su volumen, aunque no es preciso que blanqueen.
5.- Añadimos poco a poco, la mantequilla derretida a la mezcla de huevos, mientras seguimos batiendo, hasta conseguir una mezcla uniforme.
6.- Incorporamos en dos o tres veces la mezcla de harina alternándola con la leche, mezclando bien después de cada incorporación, pero ojo no sobremezclar.
7.- Añadimos por último las semillas de amapola en dos o tres veces, procurando repartirlas bien por toda la masa.
8.-Volcamos sobre el molde encamisado y llevamos al horno a media altura durante unos 55-60 minutos, o hasta que al pinchar en el centro del cake, el palillo salga limpio.
9.- Extraemos del molde y dejamos enfriar sobre una rejilla.
Disfrutamos en la merienda con un cafecito, o al sol de Febrero, abrigaditos, pero contentos.
Se conserva bastante bien envuelto en papel de aluminio al menos 1 semana. Es ideal para tomar en el desayuno, incluso ligeremaente tostado y cubierto por una buena mantequilla.
Disfrutamos en la merienda con un cafecito, o al sol de Febrero, abrigaditos, pero contentos.
Se conserva bastante bien envuelto en papel de aluminio al menos 1 semana. Es ideal para tomar en el desayuno, incluso ligeremaente tostado y cubierto por una buena mantequilla.
A disfrutar.
- Ralladura de 2 limones ecológicos bien limpios (solo la parte amarilla)
- 30 gr. de semillas de amapola
- 350 gr. de harina integral (puede ser de espelta)
- 200 gr. de azúcar moreno
- 250 ml de leche a temperatura ambiente
- 200 gr. de mantequilla
- 3 huevos "L" a temperatura ambiente
- 1 sobre de gasificante de respostería 16 gr. aprox. (tipo Royal)
- 1 cucharadita de sal
- Precalentamos el horno 180ºC calor arriba y abajo. Encamisamos un molde de cake de unos 25 x 12 cm, forrandolo con papel de horno.
- Derretimos a fuego lento la mantequilla y reservamos fuera del fuego para que se entibie
- Mezclamos la harina, el gasificante y la sal. Reservamos
- Batimos bien los huevos con el azúcar y la ralladura de limón, hasta que hayan doblado su volumen, aunque no es preciso que blanqueen.
- Añadimos poco a poco, la mantequilla a la mezcla de huevos, mientras seguimos batiendo, hasta conseguir una mezcla uniforme.
- Incorporamos en dos o tres veces la mezcla de harina alternandola con la leche, y la mezclamos bien hasta que esté toda incorporada. (Ojo no sobremezclar)
- Añadimos por último las semillas de amapola en dos o tres veces, procurando repartirlas bien por toda la masa.
- Volcamos sobre el molde encamisado y llevamos al horno a media altura durante unos 55-60 minutos, o hasta que al pinchar en el centro del cake, el palillo salga limpio.
- Extraemos del molde y dejamos enfriar sobre una rejilla.
Virginia
Fatal, demasiado grasoso y la temperatura está mal. No la hagan para no desperdiciar los ingredientes.
Hola Susan, cuanto siento que no te haya gustado, ni funcionado. La verdad es que eres la primera que me dice que la que la temperatura del horno no le funcionado y la primera que me dice que es muy graso.Hasta ahora todo el mundo está encantado y repite. De hecho no es una receta mía, como ves es de un libro de narrativa. ¿A qué te refieres con que no ha funcionado la temperatura? ¿Quizás en algún paso hubo un error? ¿Precalentaste el horno? Yo lo hago muy a menudo, y no me resulta graso, pero en eso poco puedo ayudarte, va en gustos. Un saludo.
Parece un bizcocho de limón, efectivamente. Tiene que estar delicioso, y no te quepa duda, en cuanto baje al pueblo le pido a mi amiga Maribel unos limones de su hermoso limonero y me pongo manos a la obra. Ya lo estoy oliendo !!!.
Saludos Virginia.
Hola, tiene una pinta estupenda, lo estoy haciendo ahora pero no indicas en que paso se añade la leche, casi no se la pongo, jeje. La he añadido al final. A ver que sale. Te cuento
Qué tal te salió? Acabo de meterlo al horno con el mismo «fallo» que tu. Tengo 50minutos para preparar otra cosa y va a ser un fiasco.
Su blog es hermoso. Me pierdo cada vez que en su foto y sus colores. Perdóname español no del todo correcta, pero quería lascirti mi saludo.
Pronto voy a hacer el pan!
besos
Thanks so much Debora for your visit.. Dont worry about your spanish, It´s just great to hear from you. Love to see your Lemon Bread.
Según he leído la receta acabo de encargar el libro del Pan de limón en mi librería favorita. En cuanto a la receta, tengo todos los ingredientes a mano y con lo que me gusta el limón voy a por ella. 🙂