Los crumbles son rápidos y ricos pasteles preparados a base de fruta horneada y cubierta de una capa de masa quebrada desmenuzada a base de harina, mantequilla y azúcar. Es tradicional de Gran Bretaña, donde se cree que tuvo su origen en la época de racionamiento de la II Guerra Mundial. Para mi gusto uno de los postres mas agradecidos tanto en su elaboración como al paladar.
Me chifla el de manzana, y el de ciruelas asadas, con manzana y fresas, un autentico pecado, el de fresas y ruibarbo una perdición, pero casi con cualquier fruta es delicioso.
En esta ocasión lo he preparado con unos cranberries o arandanos rojos. El resultado ligeramente menos humedo, que si usamos una fruta con mas agua, como la ciruela o la fresa, pero aboslutamente delicioso, porque los azúcares de la fruta se caramelizan formando una especie de caramelo natural.
Al topping además de la harina, azúcar y mantequilla le he añadido unos copos de avena, para darle un punto mas de textura. Y el resultado lo he acompañado de yogurt griego casero. Ha sido un postre de 10.
La receta sencillisima, así que no me lío mas:
INGREDIENTES:
Para el Topping:
- 100 gr. de harina
- 75 gr. de mantequilla muy fría cortada en cubitos o rallada.
- 75 gr. de azúcar
- 50 gr. de copos de avena
- Una pizca de sal
Para el relleno de fruta:
- 300 gr. de cranberries o arandanos rojos frescos o congelados
- 1 Cucharada de azucar avainillado
- 1/2 cucharadita de maizena
- El jugo de 1/2 limón
Para acompañar un buen yogurt casero.
PREPARACIÓN:
Comenzamos preparando el topping:
Mezclamos en un bol grande la harina con la sal y la mantequilla muy fría, y con ayuda de un blender o dos cuchillos, o simplemente con las manos, lo vamos desmenuzando hasta que lo convertimos en una especie de arena. Añadimos el azucar, mezclamos y a continuacion los copos de avena, y repetimos la operación. Cubrimos y al frigo a enfriar.
Vamos con el relleno:
En un bol colocamos el azucar, el jugo de limón y la maizena, procurando que la maizena no nos cree grumos. Bañamos con esta mezcla los cranberries, procurando que todos ellos queden bien impregnados. Dejamos reposar al menos media hora, para que el azucar se disuelva y los arandanos rojos desprendan sus jugos naturales.
Entretanto, precalentamos el horno a 200ºC y engrasamos bien una fuente poco profunda. En mi caso utilicé dos de diferentes tamaños.
Una vez el horno está precalentado, repartimos el relleno en la base de las fuentes y cubrimos con el topping.
Horneamos a media altura unos 20-25 minutos, o hasta que veamos que la fruta burbujea bajo el topping y este aparece dorado.
Sacamo del horno, dejamos entibiar sobre una rejilla y disfrutamos tibio acompañado de un buen yogurt casero.
Consejos:
– Si usáis fruta congelada, no es preciso descongelarla, salvo que sea una fruta con mucha agua, pues se irá descongelando mientras se disuelven los azucares.
– El uso de la maizena da un punto meloso al relleno que a mi me gusta mucho, pero podeis prescindir de ella.
A disfrutar.
Virginia
maria
Interesante y delicioso postre Virgiania. Hace muchos años yo hacía una cosa parecida con manzana y nueces. ¡¡ Que descubrimiento!!, los arándanos me encantan, y el toque de yogurt me parece buenisimo.
Me espera un otoño muy culinario con tus recetas.
Saludos cordiales.
Caterina
Me encantan los crumbles, ahora que viene el frío me parecen un postre ideal. Además van muy bien con fruta que quieres aprovechar o para hacer un postre con la que esté de temporada. El toque del yogur le da un punto extra que aprovecharé la próxima vez que haga. Enhorabuena y besos!!!
Palmira
Es de los postres que nunca defraudan y siempre tienen mucho éxito… además que los puedes improvisar cuando surgen invitados de último minuto :o)
Me encanta servirlo con yogur cremoso, le da el contrapunto perfecto para mi gusto.
Besos y feliz semana,
Palmira