El otoño es casi mi estación del año favorita. Es época de recogimiento después de la vorágine del verano, de ralentización del tiempo que te permite paladear cada instante de forma mas serena, tiempo de melancolía. Pero también es tiempo de color, de renacimiento, porque no debemos de olvidar que la primavera comienza cuando despunta el otoño. La caída de esas hojas que permiten al árbol preservar su vida mas allá del frío, no es sino el comienzo de la sabia nueva que está por brotar. La cuadratura perfecta del círculo.
Pero como os digo, el otoño es tiempo de color, de parajes bellos teñidos en ocres y rojizos.
Así que no he encontrado mejor forma de homenajear el otoño, que con una visita virtual a uno de mis lugares favoritos en estas fechas por su majestuosidad y belleza, “Quinto Real”.
“Quinto Real” es un bosque de hayas en Navarra, en la muga con Francia, formando parte de lo que tradicionalmente se conoce como el País Vasco Francés. Ahí donde lo véis, su propiedad ha sido siempre objeto de sangrientas disputas entre los pastores franceses de Baigorri y los españoles del Valle de Erro.
Si queréis visitarlo, para alcanzar este hayedo, deberéis primero llegar hasta Eugi, y desde allí ascender la carretera, que en pocos minutos os comenzará a deleitar con un concierto de colores que no será sino el avance de lo que está por llegar.
bajo su frondosa vegetación esconde rincones singulares como la Real Fábrica de Armas de Eugi,
Su nombre proviene de la Edad Media, ya que en esa época se denominaba “Quinta” precisamente al canon que se pagaba a los Reyes Navarros en concepto de pastos y monte, equivalente a una quinta, o sea un 20%. Así que haceos un idea de su riqueza natural.
En las entrañas de Quinto Real, existen también multitud de manantiales de agua fresca y ríos, entre los que destaca, como ya os hemos mencionado, el Río Arga, que abastece a Pamplona gracias al pantano de Eugi, y bajo cuyas aguas se esconden las ruinas de la antigua Fábrica de Armas de este pueblo.
Una parte de esas ruinas, la mas moderna, no fue pasto de las aguas, y aun se conservan escondida bajo la hiedra en el bosque. Tan solo quedan algunos muros y pasajes subterraneos, pero es un espectáculo verlos imponentes bajo el avance de la vegetación.
No penséis que se trataba de una fábrica “moderna”. La fábrica se construyó allá por el siglo XVI y cerró sus puertas en el siglo XVII, cuando se agotaron los recursos. ¿Qué se construía entre sus muros? Lo necesario para las guerras de la época, proyectiles para cañones y armas menores.
En esta época del año, Quinto Real, es lugar también muy visitado por seteros, que buscan en su escondidos rincones, de una parte mas de la riqueza que nos ha dejado el ya perdido verano, las setas. Aquí podéis ver parte del botín que recogido ese día.
Pero no os despistéis, porque junto a estas setas, ricas y aromáticas, también encontraréis otras no comestibles e incluso venenosas bajo esa apariencia atractiva y hasta divertida.
Y que decir de las castañas, que encuentras por centenares, bajos las ramas de los castaños que pueblan el bosque. Precisamente estas castañas serán las protagonistas de una de nuestras próximas recetas.
Como podéis comprobar, un autentico placer disfrutar de sus caminos cubiertos de hojas,
Un paraje cuya belleza es difícil de definir con palabras.
Por eso yo lo hago con imagenes, para que mis palabras no se queden cortas y podáis disfrutar de todos sus maravillosos rincones.
Eso si, os animo a visitarlo si tenéis ocasión, porque no encontraréis solo lugares bellos, sino lugares cargados de historia y misterio, y seguramente el alma perdida de alguna sorgiña, atrapada por la majestualidad de estos parajes.
En unos días nos volveremos a encontrar, esta vez con un receta que acompañó nuestra tarde otoñal de aquel día.
A disfrutar.
Virginia
Laura Martínez
¡Qué preciosidad de sitio y de fotos!
Clara (Delicias Baruz)
El otoño es mi estación favorita sin duda, pero si hubiese tenido alguna, viendo estas fotos me hubiese convencido…bellísimo!!
Hampton SC
Magníficas imágenes, texto y evocación del otoño…
Un paraje fantástico: gracias por compartirlo ^-^
Yvette
¡Ya estoy organizando una excursión para poder ir! ¡muchísimas gracias!
La mujer del fotógrafo...es química
La verdad es que los colores del otoño son espectaculares, y tu los has sabido plasmar perfectísimamente con esas imágenes tan increíbles.
Un abrazo
Cristina
Esther
Qué belleza! Muchas gracias por compartirlo. Me ha encantado el paseo 😉
Esther
MARIA DOLORES
Yo tampoco sé ni que decir…emocionante, conmovedor, mágico….qué tonalidades tan preciosas se entremezclan en el paisaje…Estas fotos son para hacerte un póster bien grande y ponértelo en un lugar de la casa bien a la vista, para poder disfrutarlo….como siempre excelente Virginia….
Por aquí por Castellón se empieza a ver algún roblellón, pero yo cuando salgo por el monte….no encuentro nunca ninguno…jiji….
May
Que preciosidad de paisajes, te felicito por las fotos, que gran fotógrafa eres y te envidio por haber disfrutado de esos paisajes, besos!!!
Noelia "Cuina amb Noe"
No te puedo decir mucho porque me has dejado sin palabras! Que maravilla de fotos, de lugar y de todo!! Tomo nota para hacer un viajecito a tan maravilloso lugar. Una entrada preciosa.
Un beso.
Noe
Encarni Linde
Que maravilla de sitio! Daria culquier cosa por poderme teletransportar en este momento y poder disfrutar de los colores del paisaje, sentir la humedad, el olor a bosque, a tierra…………poder disfrutar de todo eso es un verdadero lujo.
M Luz
Hoy me has emocionado Virginia. No sabría decir cual es mi época preferida del año, pero el colorido del otoño, los paisajes tan espectaculares que nos regala (prueba de ello tus fotos, ¡¡¡¡¡espectaculares por otra parte!!!!!) hace que dude mucho. Navarra tiene un sabor y un encanto muy especial para mi y éste hayedo que tenemos pendiente desde hace años hace que la añore mucho más. Te envidio por tener tan a mano estos sitios tan especiales. Disfrútalos por mi que así podré disfrutarlos, visualmente al menos. Muchos besos y gracias por compartir tus experiencias.
Beatriz Tobegourmet
Qué paisajes! son de ensueño… los árboles cubiertos de musgo… el ocre de las hojas, y esas setas que parecen de cuento. Me ha encantado este paseo virtual.
MARI NURI CAKE
Una preciosidad de fotografías y de sitio. Ojalá pudiera ir a verlo, me ha encantado. Nosotros estuvimos hace unos años en el Bosque de Irati, pero en verano, y nos gusto mucho. Me imagino que en otoño estará tan precioso como éste.
Me gusta tanto la naturaleza, el aire libre y pasear por el monte, por un bosque tan bonito como éste. Es una felicidad.
Besos
Lacajitadenieveselena
Que preciosidad de reportaje Virginia, tengo los pelos de punta además estoy escuchando una canción algo melancólica de fondo que le va perfectamente y casi que me emociono.
No conozco mucho de Navarra, Pamplona y poco mas, tengo pendiente una gran escapada, su gastronomía y por lo que veo paisajes, bosques y naturaleza son increíbles. Me apunto este sitio tan estupendo, debe ser precioso en cualquier época del año pero si que es verdad que el otoño le da un “no se que” de colores, olores y sensaciones que embriaga.
Gracias por la excursión 😉
Besos
Nieves
Begoña
!!No te soporto!!!!!!!!!!!!!!!!! De verdad, qué envidia me ha dado este paseo…. por aquí seguimos casi en verano, el otoño ni olerlo!!!
Un reportaje impresionante, las fotografías no pueden ser más bonitas, ni mejores, únicas!!!!
You are the best, ya te lo he dicho muchas veces, te lo vas a acabar creyendo, pero lo harás por derecho.
Aunque conociéndote, tu humildad, te ayuda a no desbordarte.
Un abrazo, Begoña